Existen siempre en cada área lugares que son emblemáticos, míticos y espectaculares. Lugares que nos atraen a casi todas las personas independientemente de creencias, procedencias, sexos... Los lugares son como elementos vivos que surgen, cambian, desaparecen y a veces renacen. Son parte del ciclo de la vida.
Me opongo frontalmente al dicho popular que promulga que "sobre gustos no hay nada escrito"! Lo hay y mucho!
Como si estuviera grabado en nuestra genética, generación tras generación, las personas visitamos esos lugares para admirarlos y vivirlos e intentar inmortalizarlos en nuestra memoria.
Hoy escribo desde uno de estos lugares. No literalmente, pero si transportándome allí a través del recuerdo muy reciente, de ayer mismo.
Segunda vez en dos semanas que subo, habrá alguna más en los días próximos, y creo que nunca me cansaré de subir al llamado Púlpito o Preikestolen. Jamás es igual y siempre es nuevo. Cambiante el escenario y cambiantes los personajes que me acompañan.
Huyamos ya de sentimentalismos y hablemos de información práctica sobre la ruta:
Nivel de dificultad: media
Distancia recorrida: 7,6 km ida y vuelta por el mismo sendero.
Desnivel ascenso: 300 m aprox.
Para llegar al inicio podemos encontrar transporte público desde la ciudad de Stavanger. Un ferry nos lleva a Tau, y desde allí buses de línea nos acercan al aparcamiento desde el que se inicia la ruta. Podemos embarcar nuestro vehículo en el mismo ferry. Otra alternativa es hacer el crucero por el fiordo de Lyse y desembarcar en Oanes para desde allí subir al aparcamiento (consultar transporte con la empresa de cruceros que contratemos, una alternativa es Rodnefjord)
El ascenso al Púlpito o Preikestolen es una ruta sencilla para iniciados, pero puede resultar muy dura para toda aquella persona que no tenga costumbre de caminar por montaña. Como ruta de senderismo yo la calificaría como dificultad media. Son 300 metros de desnivel ascendente y una distancia de ida de 3,8 km. La parte superior se eleva 604 m sobre el nivel del mar, sobre el fiordo, casi de manera vertical.
Andando rápido en una hora y media o menos estaremos arriba, pero subiendo tranquilamente nos costará unas dos horas/dos horas y media. El camino está bien marcado y es evidente. Unas "T" de pintura roja aparecen cada muy poquito para que los casi 100.000 visitantes no tengan problemas de orientación cuando las condiciones atmosféricas no son favorables, cosa que en Escandinavia es frecuente...
Andando rápido en una hora y media o menos estaremos arriba, pero subiendo tranquilamente nos costará unas dos horas/dos horas y media. El camino está bien marcado y es evidente. Unas "T" de pintura roja aparecen cada muy poquito para que los casi 100.000 visitantes no tengan problemas de orientación cuando las condiciones atmosféricas no son favorables, cosa que en Escandinavia es frecuente...
El terreno, como comentaba al principio del párrafo, resultará sencillo para aquellas personas con costumbre de andar por el monte y resultará muy difícil para los más neófitos en la materia. Desde el año 2013 se están llevando a cabo trabajos de acondicionamiento del camino a cargo de unos sherpas nepalíes que están "nepalizando" el sendero (los que hayan hecho trekking por el Himalaya me entenderán...).
Las grandes losas de granito hacen que sea más transitable en los días más húmedos, y los tramos más escarpados se superan mediante escalones. En los pasos más delicados y los que cruzan tramos encharcados permanentemente, se pasan mediante pasarelas de madera.
El Púlpito es una gran planicie granítica de 25 x 25 metros y no tiene ninguna barrera de protección. Es frecuente ver a los visitantes sacándose la mítica foto con los pies colgando en el vacío. Arriba veremos todo tipo de personas. Desde los montañeros mejor equipados a señoras con tacones... Curiosamente no han habido cifras reseñables de siniestralidad, aunque todos los años se efectúan varios rescates por incidencias en la ruta.
Las vistas son impresionantes y sobrecogedoras. Personas con vértigo pasaran un poco de apuro en los últimos metros al asomarse al fiordo pero se puede llegar sin tener que exponerse a la caída.
Sin duda uno de los mejores miradores del planeta.
Suerte y buena ruta!!